domingo, 10 de julio de 2011

10 of July.


“Caía. Caía hacia un vacío sin fondo. Alzaba mi mirada al cielo, pero todo lo que veía era oscuridad. Y su mano. Una delicada y gentil mano que me buscaba entre las sombras. Intenté gritar, pero mi voz se tornaba en un grito ahogado. Y caía. Y sentía que la perdía...

Abrí los ojos y me incorporé sobresaltado. Notaba la respiración acelerada y mi corazón latía desbocado. Me giré con preocupación, y allí estaba ella, todo lo que yo necesitaba. Tranquila, calmada. Con los ojos cerrados y los labios curvados en una sonrisa. Me froté los ojos con nerviosismo. “Sólo ha sido un sueño, sólo ha sido un sueño...” me repetía una y otra vez mientras continuaba temblando sobre un lado de la cama, intentando en vano volver a conciliar el sueño.

De repente, un fuerte viento arrancó las cortinas que cubrían la intimidad de la habitación y abrió la ventana con un golpe seco, precipitándose al interior acompañado de un siniestro silbido. Me asomé al exterior y quedé atrapado por el brillo rojo de una luna hipnotizante que se alzaba en el cielo, nublando mis sentidos y paralizando mi cuerpo.

Unos instantes después, una misteriosa energía agotó mis fuerzas, haciéndome caer de rodillas, envuelto por una densa niebla que se abría paso poco a poco, inundando la estancia con un efecto anestesiante… Lo último que oí fueron sus aterrados chillidos…”

1 comentario:

  1. me gusta esta frase: "las cortinas que cubrían la intimidad de la habitación"

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